Sensibilización por parte de Harold Yepes de la biblioteca
Observando la exposición.
Niña Laverde.
Ordoñez, leyendo.
Niñas Velasquez y Useche, haciendo lectura.
Etudiante Chavarro en lectura.
Como dice el viejo y conocido refrán: ‘El que persevera alcanza’. Ese es el caso de Jefferson Andrés Garay Osorio, el hondano que vistió con orgullo los colores del Cortuluá durante tres años y que ahora el fútbol le entrega la oportunidad de estar en el Once Caldas.
Para el joven de 19 años, nacido el 14 de noviembre de 1991, quien nació y se formó futbolísticamente en Honda y creció en Puerto Bogotá, Cundinamarca, ser parte de la plantilla del ‘Blanco - Blanco’ es “un sueño”.
Aunque una lesión lo alejará cerca de cinco meses de los terrenos de juego, la lucha por llegar a figurar en el fútbol profesional colombiano está cada vez más cerca.
Como hace año y medio, cuando estaba en búsqueda de su titularidad en el Cortuluá, Jefferson Andrés venía de una lesión en una de sus rodillas, pero el constante esfuerzo lo llevó a convertirse en una de las revelaciones del elenco del ‘Corazón del Valle’.
“Gracias a Dios tuve la oportunidad de destacarme con el Cortuluá y que luego el Once Caldas estuviera interesado en mis servicios como futbolista, por eso me llamaron y ahora hago parte de la plantilla”, expresó Jefferson Andrés Garay.
Y agregó: “Fue una alegría muy grande llegar a una gran institución como el Once Caldas y la ventaja es que al profesor (Juan Carlos Osorio) le gusta dar la oportunidad a los jóvenes”.
El regreso al ‘Blanco’
La vida y el Once Caldas volvieron a encontrarse en la carrera de Garay Osorio, quien hace un par de años buscó la oportunidad en ese conjunto, en el que duró nueve meses en las divisiones inferiores.
Pero, según su padre, Sammy Rodríguez, “no llenaba las expectativas porque era muy delgado, su masa muscular no era la ideal, pero no fue impedimento para seguir en búsqueda de su sueño”.
Y fue precisamente en esa continuación de su sueño, luego de lograr un cupo en la formación titular del Cortuluá, cuando Jefferson Andrés saltó al elenco profesional.
“La oportunidad se presentó luego de un partido que tuvimos con el Once Caldas. El asistente técnico Pompilio Páez habló con el técnico Juan Carlos Osorio y llegaron a un acuerdo entre los dos clubes, con el fin de irme al Once Caldas”, expresó Garay Osorio.
El ‘fichaje’ que hace algunos años buscó el hondano con el ‘Blanco - Blanco’ se concretó bajo las órdenes de Juan Carlos Osorio.
“Cuando llegué a la institución, el profesor Osorio me puso en la formación titular y estuvo alternándome también con los suplentes. Me permanecía moviendo porque él (Juan Carlos Osorio) estaba buscando un mediapunta y gracias a Dios lo encontró conmigo”, puntualizó el futbolista Pijao.
Y agregó que “esta es la continuación de un sueño que cumplí cuando llegué al Cortuluá, luego alcancé la titular y ahora di el salto al Once Caldas. Gracias a Dios se dio este sueño”.
Lo infortunado
Luego de demostrar sus dotes futbolísticos y el trato del balón con el conjunto caldense, Jefferson Garay enfrenta en estos momento un obstáculo que espera superar.
“Hace cuatro días, infortunadamente, en una práctica de la pretemporada que estaba haciendo con el equipo contra el Pereira, en un mal giro que hice me lesioné la rodilla derecha, con lo que se produjo una ruptura en el ligamento cruzado”, sostuvo el jugador tolimense.
Y agregó: “El médico Héctor Fabio Cruz, quien será el encargado de hacerme la operación, me dijo que en cerca de cinco meses volveré a los campos de entrenamiento. Esto fue una tristeza muy grande, porque había logrado un cupo en el equipo alterno, pero así son las cosas del fútbol y hay que salir adelante con la ayuda de Dios”.
Por el momento, el deportista Pijao espera salir avante de la operación en su rodilla derecha para vestir oficialmente la camiseta del Once Caldas en el fútbol profesional colombiano.
“El Once Caldas es un equipo muy unido, donde las personas que lo integran son una familia, lo que lo motiva a uno a trabajar fuerte”, dijo Garay Osorio.
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